En algunos tipos de cáncer aparecen signos y síntomas que deben atenderse de inmediato y ser motivo de consulta; en otros, la enfermedad avanza silenciosa y compromete la vida.
El cáncer aparece cuando un grupo de células, que normalmente están programadas para nacer, crecer y morir, se ‘revelan’ y comienzan a “crecer autónomamente y a replicarse sin ningún control, a una velocidad mayor que cualquier otra célula del cuerpo”, explica el doctor Andrés Monroy, coloproctólogo especialista en cirugía de colon y recto.
En algunos tipos de cáncer hay síntomas que deben ser atendidos a tiempo, para evitar que esas células tumorales sigan creciendo o expandiéndose a otros tejidos y órganos. Desafortunadamente, en algunos casos la enfermedad cursa sin ningún síntoma o estos aparecen cuando ya está muy avanzada, es decir, en estadío 3 o 4, lo que limita el tratamiento, aumenta el riesgo de metástasis y compromete la vida.
Por eso, conocer sus antecedentes familiares, evaluar sus propios hábitos de vida y atender las recomendaciones médicas, como hacerse la citología o la mamografía, marcan la diferencia.
Por eso, conocer sus antecedentes familiares, evaluar sus propios hábitos de vida y atender las recomendaciones médicas, como hacerse la citología o la mamografía, marcan la diferencia.
Algunos síntomas que debe atender
Enfatiza la doctora Sandra Franco, jefe del Centro de Oncología de la Clínica del Country, que este es el momento de estar más atento que nunca a los síntomas de cáncer y “asistir de forma urgente al especialista, porque esto facilita el diagnóstico temprano e incrementa enormemente la probabilidad de sobrevida”. Veamos algunos:
- Cáncer de mama: inflamación de la mama; bultos, irritación o formación de hoyos en el seno o cerca de la axila; dolor, secreción o inversión del pezón.
Aunque es importante realizarse un autoexamen mensual de mama, para conocer bien la glándula y detectar a tiempo cualquier cambio, a veces estos son imperceptibles; por eso, un examen como la mamografía es de vital importancia para detectar a tiempo el cáncer y luego, podrían ordenarle una ecografía, como prueba complementaria.
En la Resolución 3280 de 2018 (Ruta Integral de Atención en Salud), el Ministerio de Salud y Protección Social recomienda, para la detección temprana, el diagnóstico oportuno y el tratamiento, la mamografía de tamización cada dos años en mujeres de 50 a 69 años, un examen clínico de mama cada año a partir de los 40 años o antes, si hay antecedentes familiares o síntomas, y el autoexamen de mama ocho días después del periodo menstrual o un mismo día del mes para mujeres menopaúsicas.
“El diagnóstico temprano salva vidas, y este puede ser posible si se atienden algunos signos y síntomas, pero también si se hacen ciertos exámenes con regularidad, a partir de su estado de salud y sus antecedentes médicos. ‘No nos olvidemos del cáncer’.«
- Cáncer de cuello uterino. En etapas avanzadas puede presentarse sangrado vaginal entre los periodos menstruales, después de la menopausia o durante las relaciones sexuales; flujo vaginal acuoso y con sangre, que puede tener un olor fétido, y dolor pélvico o dolor durante las relaciones sexuales.
Se recomienda vacunarse contra el Virus del Papiloma Humano (VPH), que reduce el riesgo de este tipo de cáncer, y hacerse la citología (prueba de Papanicolau) con periodicidad, según las indicaciones de médico; la prueba permite la detección precoz de este cáncer y de otro tipo de lesiones en las paredes del cuello uterino.
- Cáncer de próstata. Si bien suele cursar sin ningún tipo de síntoma, en especial en los estadíos iniciales e incluso en fase avanzada, y estos pueden variar de una persona a otra, es fundamental estar atento y consultar si presenta sangre en la orina o semen; debilidad o adormecimiento de las piernas y pies o pérdida del control de esfínteres. De igual forma, si tiene antecedentes familiares de cáncer.
La prueba del antígeno prostático específico (PSA), que permite medir los niveles de antígeno prostático específico en sangre es la mejor manera de detectar algún problema con su próstata, en especial porque tener aumentados los niveles de PSA puede ser un signo de cáncer de próstata, que su médico confirmará con otros exámenes adicionales, como una biopsia.
- Cáncer colorrectal. Cambio de hábitos de evacuación (diarrea, estreñimiento o reducción del diámetro de las heces), sangrado rectal o en las heces, ocasionando su oscurecimiento, un cansancio extremo y pérdida de peso.
En este caso puntual, el doctor Andrés Monroy, coloproctólogo, especialista en cirugía de colon y recto, llama la atención sobre la presencia de pólipos, porque si bien “no todos se van a volver cáncer”, con el paso del tiempo, este conjunto de células que se agrupan en el revestimiento del colon sí puede convertirse en cáncer.
“En cánceres como los de colon, mama y cervix o cuello uterino, señala el especialista, hay elementos diagnósticos que son muy importantes y si bien, algunos como la conoloscopia pueden causar cierta incomodidad y requieren una preparación antes de hacerlo, la relación riesgo beneficio es muy grande a favor de que hay que hacerla como mecanismo de prevención y para detectar los pólipos”.
- Cáncer de pulmón. Como sucede con la mayoría de los casos de cáncer, en sus etapas iniciales puede no presentarse síntoma alguno, pero hay antecedentes, además de los familiares, que no deben desatenderse, como el hábito de fumar, que eleva el riesgo de cáncer.
Se sugiere estar atentos a síntomas como tos que no desaparece, tos con sangre (incluso en pequeñas cantidades), silbido en el pecho, bronquitis o neumonía que no se disipa, ronquera, dolor en el pecho que empeora al respirar profundamente, falta de aire, pérdida de peso, cansancio, dolor en los huesos y dolor de cabeza.
- Enfermedades hematooncológicas. Ganglios inflamados y no dolorosos, fiebre intermitente e infecciones, sudoración excesiva (especialmente en la noche), pérdida de peso y cansancio extremo son algunos signos que se deben atender, precisa la doctora Sandra Franco, porque pueden estar relacionados con enfermedades como leucemias, linfomas y otras.
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