En esta temporada aumenta el consumo de pescados, mariscos y enlatados. Las autoridades de salud adelantan controles de supervisión, pero también piden a la ciudadanía comprar en lugares seguros y mirar bien el producto.
La Secretaría Distrital de Salud (SDS), el Instituto Nacional para la Vigilancia de Medicamentos y Alimentos, y el Ministerio de Salud y Protección Social hacen un llamado a la población para que incremente las medidas de higiene en esta Semana Santa, tanto para la manipulación como para la preparación y conservación de alimentos como los pescados, cuyo consumo se incrementa en esta temporada.
También se han adelantado controles y operativos de inspección y vigilancia en los establecimientos de expendió de mariscos y pescados, para verificar que se cumpla con las condiciones higiénico sanitarias, y de esta manera contribuir en la prevención de intoxicaciones alimentarias.
“Los compradores deben asegurarse de que el pescado fresco, el pescado seco y los productos enlatados que adquieran estén en óptimas condiciones. Las temperaturas adecuadas de refrigeración deben estar entre 0°C y 4°C y la congelación en menos de 18°C. Se recomienda no comprar pescado en ventas ambulantes”, indica en un comunicado la Secretaría Distrital de Salud de Bogotá.
Es importante, además, adquirir los productos en lugares seguros, de tradición y confianza, en donde se garantice no solo la calidad del producto, sino su conservación y adecuada manipulación.
Estas son las principales características y condiciones que se deben tener en cuenta al momento de comprar pescados y enlatados, precisa la SDS:
Pescado fresco
- Sus escamas deben ser brillantes y unidas entre sí.
- La piel debe estar húmeda y tersa, sin laceraciones ni arrugas.
- Los ojos transparentes, brillantes y salientes, y el iris sin manchas rojas.
- Las branquias deben ser húmedas y brillantes.
- El olor debe ser fresco, no extraño, como el del amoníaco o el óxido.
Pescado seco
- El color debe ser amarillo uniforme.
- No debe tener manchas rojizas o verdosas.
- Debe tener consistencia dura.
- El sabor debe ser salado.
- No debe presentar olor parecido al amoníaco.
Pescado congelado
- Debe estar duro.
- No acepte pescado blando o semicongelado.
- El color de la carne debe ser rosada. La piel, según la especie, puede ser de color oscuro.
- Si el pescado presenta algún olor extraño o similar al amoníaco o al óxido, no lo compre.
Productos enlatados
- El rotulado debe ser claro, visible y fácil de leer.
- El empaque no debe tener enmendaduras, ni estar roto o en mal estado.
- Se debe verificar la fecha de vencimiento, así como la lista de ingredientes, identificación del lote y seguir las instrucciones de preparación y manipulación.
- Si el producto es importado debe tener rotulado complementario, donde se declare la información del alimento.
Características diferenciales de productos de mar en buen estado y en
descomposición